domingo, 10 de mayo de 2009

capìtulo veinticinco -



epìlogo -una ocasiòn especial -

- para serte totalmente sincero, ella no va a estar disponible ninguna noche para cualquier otra persona que no sea yo.
- era imposible luchar con èl cuando hacìa ese tipo de trampas.
- el crepùsculo otra vez. otro final. no importa lo perfecto que sea el dìa, siempre ha de acabar.
- ¿y en què extraña dimensiòn paralela habrìa asistido al baile alguna vez por mi propia voluntad? si no fueras cien veces màs fuerte que yo, nunca habrìas conseguido traerme.

0 comentarios: