domingo, 11 de enero de 2009

capìtulo tres -

el prodigio -


- siempre se me habìa dado muy mal mentir. No sonaba nada convincente.
- no hay culpa sin sangre.
- quiero saber por què miento por ti.
- era como intentar apartar la vista de un àngel destructor.

2 comentarios:

jimena dijo...

aaa sii ese es crespusculo tambien :) jeje XD lo amo esos libros ahra estoy leyendo eclipse... bueno besos !

Anónimo dijo...

la tercera frase... sin duda me quedo con esa, dice muuuuuuucho de lo que iba a sentir, y de lo que sentia